La depresión es uno de los más comunes y más serios problemas de la salud mental que enfrenta la gente hoy en día.Millones de personas en el mundo sobreviven en medio de la depresión.
Ricos, pobres, ciudadanos, campesinos, hombres y mujeres, tanto en países desarrollados como en países en vías de desarrollo.La Organización Mundial de la Salud (OMS) indicó que la depresión se convertirá en el año 2020 en la segunda causa de incapacidad en el mundo, detrás de las enfermedades isquémicas (infartos, insuficiencia coronaria, accidente cerebrovascular) mientras que en el año 2000 ocupaba el cuarto lugar.
De ahí que desde los distintos estamentos sanitarios se esté potenciando la investigación para intentar atajar este trastorno mental, cuyo índice de prevalencia, lejos de disminuir, amenaza con incrementarse a medida que transcurra el siglo XXI.
Qué es la depresión: definición
Depresión viene del latín depressio: hundimiento. El paciente se siente hundido con un peso sobre su existencia. Es un trastorno afectivo que varía desde: bajas transitorias del estado de ánimo que son características de la vida misma, hasta el síndrome clínico, de gravedad y duración importante con signos y síntomas asociados, marcadamente distintos a la normalidad.
La depresión es una enfermedad tratable, al igual que la diabetes o la hipertensión. Muchos creen erróneamente que la depresión es normal en personas mayores, adolescentes, mujeres menopáusicas, madres primerizas o en personas que padecen enfermedades crónicas.
Pero éste es un concepto equivocado, no importa la edad, el sexo o la situación de la vida, la depresión nunca es algo normal. Cualquier persona que experimente síntomas depresivos debe ser diagnosticada y tratada para revertir su condición.
El extremo de mi visión sobre la depresión
Imagínese por un momento que está dentro de una habitación, ubicado en uno de los extremos (el extremo D). Desde ese ángulo tiene una visión de las cosas definida por el lugar en el que se encuentra.
Desde ahí cada objeto de la habitación lo ve desde una única perspectiva, y no importa cuántas veces le pidan la descripción de los objetos que hay dentro de la habitación, desde ese lugar, usted va a verlo siempre de la misma manera.
Si pudiese caminar dentro de la habitación tendría una visión diferente, podría observar nuevas cosas, nuevos ángulos y nuevas perspectivas. Si pudiese caminar…. pero no puede. La depresión es uno de los extremos de la habitación (el extremo D). Un extremo en donde el que llega, queda inmovilizado, atrapado y sin poder salir a caminar.
Cientos de circunstancias y acontecimientos de la vida lo pueden llevar a ese lugar, cada persona llega al extremo de la habitación por motivos y situaciones diferentes. Quizás usted vivió su infancia sintiendo que no era lo suficientemente querido, o creyó que era menos que los otros, o ha sufrido pérdidas de las cuáles no se recuperó, quizás un día no se sintió merecedor de vivir una vida mejor y lo aceptó.
O tal vez usted vivió una infancia y adolescencia feliz, sin mayores sobresaltos y un día sin motivos aparentes se encontró en el extremo de la habitación. Pero cómo se llega a ese extremo? Cuántos pasos hay que dar para llegar a la depresión? Puede ser sólo un gran paso, o dos más pequeños, o cuatro más cortos o cientos de pasitos.
Se puede demorar semanas o muchos años en llegar al extremo, pero cuando uno se encuentre ahí se sentirá atrapado, inmovilizado y a oscuras. Al llegar al extremo D cada uno manifiesta su depresión de forma diferente, de acuerdo a la sintomatología que padezca, se clasifican en diferentes tipos de depresión.
Tipos de depresión
Al igual que en otras enfermedades, por ejemplo las enfermedades del corazón, existen varios tipos de trastornos depresivos. Los tres tipos de depresión más comunes son: Trastorno depresivo mayor, el Trastorno distímico y el Trastorno bipolar. En cada uno de estos tres tipos de depresión, el número, la gravedad y la persistencia de los síntomas varían.El trastorno depresivo mayor se manifiesta por una combinación de síntomas (vea la lista de síntomas) que interfieren con la capacidad para trabajar, estudiar, dormir, comer y disfrutar de actividades que antes eran placenteras.
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El trastorno distímico es un tipo de depresión menos grave, incluye síntomas crónicos (a largo plazo) que no incapacitan tanto, pero sin embargo interfieren con el funcionamiento y el bienestar de la persona. La característica esencial de este trastorno es un estado de ánimo crónicamente depresivo que está presente la mayor parte del día de la mayoría de los días durante al menos 2 años.
Muchas personas con distimia también pueden padecer de episodios depresivos severos en algún momento de su vida.Otro tipo de depresión es el trastorno bipolar. Éste no es tan frecuente como los otros trastornos depresivos. El trastorno bipolar se caracteriza por cambios cíclicos en el estado de ánimo: fases de ánimo elevado o eufórico (manía) y fases de ánimo bajo (depresión).
Los cambios de estado de ánimo pueden ser dramáticos y rápidos, pero más a menudo son graduales. Cuando una persona está en la fase depresiva del ciclo, puede padecer de uno, de varios o de todos los síntomas del trastorno depresivo. Cuando está en la fase maníaca, la persona puede estar hiperactiva, hablar excesivamente y tener una gran cantidad de energía. La manía a menudo afecta la manera de pensar, el juicio y la manera de comportarse con relación a los otros.
Puede llevar a que la persona se meta en graves problemas y en situaciones embarazosas. Por ejemplo, en la fase maníaca en individuo puede sentirse feliz o eufórico, tener proyectos grandiosos, tomar decisiones de negocios descabelladas, e involucrarse en aventuras o fantasías románticas.
Síntomas del trastorno depresivo mayor
No todos experimentan la depresión de la misma manera, los síntomas varían según las personas. La depresión puede ser calificada como leve, moderada o grave dependiendo de la cantidad y gravedad de sus síntomas.
Depresión
• Estado de ánimo triste, ansioso o “vacío” en forma persistente.
• Sentimientos de desesperanza y pesimismo.
• Sentimientos de culpa, inutilidad y desamparo.
• Pérdida de interés o placer en pasatiempos y actividades que antes se disfrutaban, incluyendo la actividad sexual.
• Disminución de energía, fatiga, agotamiento, sensación de estar “en cámara lenta.”
• Dificultad para concentrarse, recordar y tomar decisiones.
• Insomnio, despertarse más temprano o dormir más de la cuenta.
• Pérdida de peso, apetito o ambos, o por el contrario comer más de la cuenta y aumento de peso.
• Pensamientos de muerte o suicidio; intentos de suicidio.
• Inquietud, irritabilidad.
• Síntomas físicos persistentes que no responden al tratamiento médico, como dolores de cabeza, trastornos digestivos y otros dolores crónicos.
Síntomas del trastorno afectivo bipolar
El trastorno afectivo bipolar produce cambios del ánimo patológicos de manía a depresión, con una tendencia a recurrir y a desaparecer espontáneamente.
Tanto los episodios maníacos como los depresivos pueden predominar y producir algunos cambios en el estado de ánimo, o los patrones de cambios del estado de ánimo pueden ser cíclicos, comenzando a menudo con una manía que termina en una depresión profunda.
Algunas personas se las denomina cicladores rápidos porque su ánimo puede cambiar varias veces en un día. Otros presentan lo que se llama “estados mixtos”, en donde los pensamientos depresivos pueden aparecer en un episodio de manía o viceversa. Cuando el trastorno afectivo bipolar se presenta en niños, generalmente aparece en su forma mixta.
Durante la fase depresiva el paciente presenta:
- Pérdida de la autoestima.
- Ensimismamiento.
- Sentimientos de desesperanza o minusvalía.
- Sentimientos de culpabilidad excesivos o inapropiados.
- Fatiga (cansancio o aburrimiento) que dura semanas o meses.
- Lentitud exagerada (inercia).
- Somnolencia diurna persistente.
- Insomnio.
- Problemas de concentración, fácil distracción por sucesos sin trascendencia.
- Dificultad para tomar decisiones.
- Pérdida del apetito.
- Pérdida involuntaria de peso.
- Pensamientos anormales sobre la muerte.
- Pensamientos sobre el suicidio, planificación de suicidio o intentos de suicidio.
- Disminución del interés en las actividades diarias.
- Disminución del placer producido por las actividades cotidianas.
En la fase maníaca se presentan:
- Exaltación del estado de ánimo.
- Aumento de las actividades orientadas hacia metas.
- Ideas fugaces o pensamiento acelerado.
- Autoestima alta.
- Menor necesidad de dormir.
- Agitación.
- Logorrea (hablar más de lo usual o tener la necesidad de continuar hablando)
- Incremento en la actividad involuntaria (es decir, caminar de un lado a otro, torcer las manos).
- Inquietud excesiva.
- Aumento involuntario del peso.
- Bajo control del temperamento.
- Patrón de comportamiento de irresponsabilidad extrema.
- Aumento en la actividad dirigida al plano social o sexual.
- Compromiso excesivo y dañino en actividades placenteras que tienen un gran potencial de producir consecuencias dolorosas (andar en juergas, tener múltiples compañeros sexuales, consumir alcohol y otras drogas).
- Creencias falsas (delirios).
- Alucinaciones.
Los síntomas maníacos y depresivos se pueden dar simultáneamente o en una sucesión rápida en la denominada fase mixta.
Síntomas del trastorno distímico
Las características asociadas al trastorno distímico son parecidas a las de un episodio depresivo mayor. Varios estudios sugieren que los síntomas más frecuentemente encontrados en el trastorno distímico son:
• Sentimientos de incompetencia.
• Pérdida generalizada de interés o placer.
• Aislamiento social.
• Sentimientos de culpa o tristeza referente al pasado.
• Sentimientos subjetivos de irritabilidad o ira excesiva.
• Descenso de la actividad, la eficiencia y la productividad.
Síntomas dependientes de la edad y el sexo: en los niños el trastorno distímico parece presentarse por igual en ambos sexos y provoca frecuentemente un deterioro del rendimiento escolar y de la interacción social.
En general, los niños y adolescentes con un trastorno distímico están irritables e inestables, además de tristes. Tienen una baja autoestima y escasas habilidades sociales y son pesimistas.
En los adultos las mujeres son dos o tres veces más propensas que los varones a presentar un trastorno distímico.
Autora: Dra. Celia Antonini/Manual Diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales
Fuentes
Manual Diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales DSM iV 1195 Masson SA
http://www.nimh.nih.gov
www.respuestasaladepresion.com/queesladepresion/queesladepresion.php