La Danza Movimiento Terapia (DMT) es una psicoterapia que prioriza el lenguaje del cuerpo como forma de abordaje.
Cuando respiramos, nuestro cuerpo ya está en movimiento, esto marca el comienzo de la vida y es anterior al lenguaje y al pensamiento; la DMT trabaja con las posibilidades de movimiento de cada uno, prestando la escucha en la información que nos ofrece el cuerpo, articulando con nuestro psiquismo y así buscar nuevos sentidos.
A su vez nuestra psiquis le acerca información a nuestro cuerpo a través de ciertas imágenes, recuerdos y las emociones con los que vienen acompañados.
Esta interrelación entre el cuerpo y la psiquis va enriqueciendo el entorno que nos rodea y nuestro propio mundo particularmente en el trabajo con adultos mayores en las residencias.
La Danza Movimiento Terapia (DMT) posibilita la constitución de la “grupalidad” en geriátricos
Durante la vejez así como en las otras etapas vitales nos seguimos construyendo, nos construimos en cada cosa que hacemos cada día, a partir de nuestras acciones, en las que están implicados nuestra percepción, afectividad y cognición. Esto es siempre en un contexto, es con otros.
La DMT en este sentido garantiza un espacio de cuidado y respeto para quienes quieren reencontrarse con el cuerpo que conoce, recuerda y siente. Esta práctica reside en la relación de confianza que se establece con cada uno de los integrantes del grupo, que a su vez posibilita la constitución de la grupalidad.
Facilitando la expresión a través del movimiento como también compartiendo emociones y sensaciones.
Esto es lo que permite que cada uno se exprese a partir del movimiento y luego en el “sharing” a través de la palabra, compartiendo las emociones y sensaciones que afloran en el transcurso de la sesión. La empatía es una función intrínseca al modelo terapéutico de la DMT; implica entonar afectivamente respetando las diferencias, siempre en pos de posibilitar el encuentro.
La integración de los “que se sienten aislados” y de los nuevos residentes
Uno de los grandes beneficios de la DMT es la integración social, especialmente en esta población que muchas veces manifiesta sentirse “aislada”. Este es un espacio de encuentro con otros a través de los aspectos más lúdicos y creativos , facilitando la escucha empática, no solo del danza/movimiento terapeuta sino también de los integrantes del grupo hacia sus compañeros. Así como también la DMT promueve la vitalidad a través del movimiento y del juego; facilita la conciencia corporal precisando los límites y alcances del propio cuerpo y del cuerpo del otro; favorece la memoria tanto a nivel intelectual como corporal; y por sobre todo intenta alcanzar una mayor integración entre los aspectos afectivo, físico e intelectual.
Beneficios de la DMT para adultos mayores en residencias para adultos mayores
- proporciona una integración social, creando un espacio de encuentro con otros
- genera la escucha empática de los integrantes del grupo hacia sus compañeros
- promueve la vitalidad a través del movimiento y del juego
- facilita la conciencia corporal desde el registro sensoperceptivo
- favorece la memoria tanto a nivel corporal como intelectual
Las sensaciones de los adultos mayores en las sesiones
Los residentes frecuentemente expresan las sensaciones de libertad, alegría como también paz interior en las sesiones de DMT. La música que los transporta a momentos vividos y posibilita conectarse con las emociones que emergen desde el cuerpo en movimiento, así como también el acompañamiento del profesional permiten desarrollar un bienestar inesperado para los que no conocían esta especialidad dentro de las psicoterapias que utiliza el movimiento y la musica para promover la integración emocional, cognitiva y física del sujeto.





Un espacio continuo integrado a un marco terapéutico
La DMT ofrece un espacio en donde compartir las historias de vida, teniendo la posibilidad de seguir elaborándolas, sin perder de vista el momento actual. Por eso es tan importante cuidar el marco terapéutico de estos espacios y darle el valor correspondiente a la relación terapéutica, ya que es en la transferencia con el danza/movimiento terapeuta, sostenida en el tiempo, que se pueden ir trabajando aspectos autobiográficos.
Al mismo tiempo lo que se pone de manifiesto a través de los testimonios es que esta actividad genera mucho placer por la danza en sí, y la libertad de moverse espontáneamente, y también por la posibilidad de socializar las emociones que despierta. De esta manera los conduce vívidamente al momento presente.
¿Quién es Dolores Guzmán?


Dolores Guzmán es Licenciada en Psicología (UBA) y Danza Movimiento Terapeuta. También realizó un posgrado en la AAPPG en Psicoanálisis de las configuraciones vinculares. Actualmente, se desempeña como Danza Movimiento Terapeuta en procesos individuales y grupales. Desde el año 2013 se orientó en el trabajo con adultos mayores. Desde el 2007 acompaña a emprendedores creativos en sus procesos de crecimiento profesional. A lo largo de los años también coordinó talleres de DMT para pacientes psiquiátricos, docentes, bailarines y músicos. Durante el 2016 y 2017 asumió el cargo de Vicepresidencia de la Asociación Argentina de Danzaterapia.(AADT)